viernes, 25 de diciembre de 2009

A contracorriente...

Felices Fiestas, visitante, tanto si viniste aquí a sabiendas como si casualmente fuiste a caer, paseando en busca de espantar la soledad en día tan señalado como el de hoy, fecha en que ésta se hace irremediablemente más patente que nunca en la vastedad de un mundo demasiado repleto de ruido.
Piensa, cuando ese ruido haga mella en el ánimo al no bucear en él, que hay quién siente exactamente lo mismo dejando de girar cuando todo lo demás permanece en movimiento...
Obligadamente me resisto a la gravedad y la inercia... y esa obligación es la que duele...
El no haberla elegido...