martes, 24 de noviembre de 2009

Un regalillo...¡Muchas felicidades!


¡Te deseamos todos los de por estos lados!
Te esperamos en nuestra fiesta particular en tu honor, que para nada tampoco será sorpresa (ver tu correo), y para que vayas abriendo boca hasta que algo aparezca en tu buzoncillo físico, un pequeño regalo de parte del peque...
















¡FELIZ CUMPLE!

sábado, 7 de noviembre de 2009

Pavana.

No es el retorno. No es que haya quedado varada o que el tiempo no lo haya disuelto...
Ni tan siquiera me siento llamada, invitada, necesitada...
Simplemente una aproximación que en otra ocasión, tiempo atrás, se frustró ha avivado hoy el recuerdo...
Ni tan siquiera sé si volveré a pisar el mismo suelo de hojarasca (no tengo necesidad como dije... aunque me gustaría...), si volveré a ascender a aquel montículo de hojas caducas...
Y me pregunto, si finalmente lo hago, con los ojos humedeciéndoseme sin quererlo mientras garabateo con mala letra estas líneas en un vulgar vagón de metro, con gente diversa sin rostro, ajena al dolor, si estarás allí o si te habrás ido...
Me sonrío extrañamente, contradictoriamente, sin sentido, entre una cortina de lágrimas que empañan el viaje, o lo intentan, al imaginarte con tu pequeño cuerpo, quizá frío en naturaleza, quizá pálido, tal vez crecido ya, los minúsculos pies desnudos entre las hojas otoñales, observándonos semioculto y tímido, con mirada curiosa de fauno, entre los troncos de los árboles...
Me pregunto si nos recordarás... si nos reconocerás... si simplemente algo pueda quedar vago en tu memoria...
Me pregunto si guardarás rencor en tu pequeño corazón que apenas posibilidad de latir tuvo por habernos pasado de largo en tu vida diminuta o si lo harás quizá por reservarte tan inhóspita y lejana morada... O quizá, tal vez, por el contrario, te sentirás privilegiado de habitar tan bello paraje y no haber sido encarcelado bajo la somnolencia de la tierra sin haber salido de la prisión del vientre...
Me reconforta (¡no sabes cuánto!) el creer eso último: que aquel alma colmenera (tomo prestada, o lo quiero, palabras del poeta) se me antoje, en vez de disuelta devuelta a la tierra, formando séquito de alguna corte shakespeariana de reyes fantásicos... Feliz y afortunado destino... amable... Injusto desde aquel otro ángulo obtuso...
¿Quizá fue que tal vez nunca te fuiste?¿Quizá solo partiste momentáneamente?¿Una vuelta a la manzana?¿Uno de aquellos marcianitos adorables que, esperando "El Gancho", volviste al lugar de dónde nunca deberían haberte arrebatado?
Quizá es que ya estás aquí realmente (¡y yo buscándote en otros parajes!). Quizá tus ojos no mirarán tímidos y curiosos desde detrás de los blanquecinos troncos del hayedo milenario que es tu casa... quizá lo hagan, lo hacen ya, desde la viveza infantil que buscando alcanzarlo todo, el mundo, se agita adorable y parlanchina en el minúsculo cuerpito entre mis brazos...¿Quién sabe?
Siempre ese sueño es preferible a una realidad demasiado injusta para quién ni tan siquiera tuvo oportunidad de comenzar a vivirla...