
martes, 29 de junio de 2010
viernes, 25 de junio de 2010
Cuatro invitados.
sábado, 19 de junio de 2010
domingo, 13 de junio de 2010
Dibújame una casa: Un poquito de mí misma. HTP (Test proyectivo gráfico).

No varió lo más mínimo mi dibujo, cosa que no deja de ser curiosa, desde la infancia. Aprendí a dibujar aquella gran casa hace muchos años y me sorprendía, unos días atrás, redibujando aquella misma con aquellos mismos detalles que siempre están presentes.
Mi casa es grande, de planta rectangular, y siempre con ventanas múltiples que se abren más allá de las fachadas para mirar al exterior, al cielo, y dejar entrar la luz del sol. También el gran tejado, que suele ocupar buena parte del dibujo en sí y que imagino coloreado, como de teja roja, se agujerea en toda su extensión en redondos ventanales para permitir siempre que las ideas vuelen a través de sus aberturas al tiempo que desde ellos me pierdo en las ensoñaciones que la visión del cielo nocturno siempre favoreció.
En el frontal, en la fachada principal, una pequeña ventana circular, también en la zona de la cubierta, aguarda la llegada de algún pájaro que en su saliente repose y hasta la puerta principal conduce siempre un serpenteante camino que seguro da la bienvenida al visitante...
Hay veces, la mayoría, en que en la chimenea, en la vertiente izquierda de la fachada según se mira, humea una blanca columna para dar fe de la vida en su interior o para, quizá, crear la expectativa y confirmar la certeza de que uno será siempre bien recibido con un plato de comida caliente a la mesa...
Dibújame una casa...
(Siempre me inspiraron cierto respeto -mucho-, más desconfianza, psicólogos y adivinos... Siempre tengo la sensación de que sus ojos te traspasan y son capaces en su observación de leer el alma y cada uno de los pensamientos y secretos más ocultos...)
sábado, 5 de junio de 2010
Desolación.
Temucano, by Oscar Arancibia.
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